jueves, 10 de noviembre de 2016

VAREADORES MECÁNICOS: MI EXPERIENCIA EN LA RECOLECCIÓN DE OLIVAR

El olivo, dinero y salud (el amor corre por tu cuenta)
Que el aceite esté en un constante ascenso en el consumo mundial quiere decir algo. Quizá sea la preocupación generalizada por la salud. La fama de la dieta mediterránea y el papel del aceite de oliva en la misma tiene mucho que ver. El consumo mundial en los últimos 25 años no para de crecer. Si en 1990 se consumió 1,65 millones de toneladas, y en el 2015 ha sido de casi 3 millones. Incluso la prestigiosa y todopoderosa FDA (Food and Drug Administration) estadounidense recomienda el consumo de aceite de oliva como medida para limitar los riesgos de las enfermedades cardiovasculares y a la FDA se le hace mucho caso. Esto parece indicar, indica, que el aceite de oliva es un producto de presente y de futuro, no es una moda.
Los “números” del olivar: La globalización también alcanza al mercado del aceite ¿cómo no? Es por eso que los precios fluctúan con resortes difíciles de predecir. Lo que está contrastado es que el mercado es muy sensible a las subidas de precio y actualmente existe un consenso, grandes superficies, productores, en afirmar que un precio objetivo de 3-3,2 €/L para el aceite virgen y virgen extra es aceptable. Lo que pasa es que con el precio anterior no se está lejos de los costes de producción. Cuando el umbral de rentabilidad es tan exiguo lo que hay que procurar es bajar los costes de producción y ahí la partida dedicada a recolección tiene mucho que decir

Aceite de oliva virgen, puro zumo de fruta: El Convenio Internacional del Aceite de Oliva de reserva la denominación "Aceite de oliva virgen" al aceite procedente del fruto del olivo mediante un proceso extractivo mecánico en prensa (la distinción entre virgen y virgen extra depende del grado de acidez)

Motor, vara y cabezal recolector

A LAS “TOP MODEL” PICUAL, ARBEQUINA Y SIKITITA, LES GUSTAN LOS VIBRADORES PERSONALES
La verdad es que el cultivo del olivar ha cambiado mucho en los últimos 30 años (pies, intensivo, superintensivo, variedades…) y en general se puede afirmar que el cultivo se ha profesionalizado. Nuevas variedades, nuevos marcos de plantación y técnicas de cultivo.
Picual, arbequina y sikitita son sin duda las variedades de moda. Es cierto que la picual se subió a las “pasarelas” cuando todos hablaban de las variedades “clásicas”, su reinado fue rápidamente compartido con la arbequina que desfilaba por las “pasarelas” de los mejores viveros pero es que hoy, ambas reinas, están siendo desplazadas por la revolución del olivar, la sikitita que en realidad está emparentada con ellas pues la sikitita proviene de las otras dos: picual como parental femenino y arbequina como parental masculino.
El sistema de recogida al que optemos se debe adaptar a los nuevos “cánones” del cultivo. Con las plantaciones que ahora imperan de las variedades “modernas” el vibrador de rama es una opción muy válida.

VAREADORES PERSONALES
El vareador manual es el equipo indicado para olivareros pequeños que por el tamaño de su explotación nunca amortizarían la compra de un vibrador de tronco. La vibradora manual es una herramienta muy versátil y de un coste relativamente bajo con lo cual, en explotaciones pequeñas (hasta 500-1000 olivos) la tendencia actual es el derribo de la aceituna utilizando este tipo de vibradora.
Aunque hay muchos tipos diferentes dos son los más habituales: el vibrador de ramas de gancho y el peine. Ambos son máquinas ideales incluso para aquellas explotaciones con vibrador de tronco pues los peines son insustituibles para el acabado de puntas.
Vibrador de gancho:
Se trata de un sistema de inercia unidireccional. Un mecanismo de biela-manivela acciona un brazo que acaba en una pinza y esta pinza es la que sacude la rama.
A diferencia de los vibradores grandes de tronco que son capaces de vibrar todo un árbol, el manual es capaz de generar un movimiento de vibración en ramas secundarias (hasta 5-6 cm de diámetro) a las cuales se les engancha con una vara, de unos 3 m de longitud, que finaliza en un gancho.
El mecanismo de vibrado es del tipo biela-manivela trasmitiendo una vibración de unos 700 a 2000 ciclos/minuto que lo normal es producirlas mediante un motor de explosión de 2T aunque hay algún caso de motor eléctrico.
Se equipan con arneses para “colgar” la máquina de la cintura del operador y aunque están bien diseñados es cierto que se trata de una labor pesada (las máquinas pesan del orden de 15 kg) que requiere que a lo largo de la jornada al menos 3 personas se turnen el manejo del vibrador. A su favor hay que decir que son muy eficientes y los daños que ocasiona al árbol son mínimos.
Este tipo de vibrador lleva un sistema de autoequilibrado, y en los últimos años, se exige al fabricante que homologue la máquina según la normativa vigente (RD 1311/2005) sobre protección de la salud y seguridad de los trabajadores frente a los riesgos derivados de la exposición a vibraciones mecánicas.
El palmeador y el peine:
Otras máquinas que se usan son los “peines” o “palmeadores” o vareadores palmeta. En este caso, un pequeño motor se encarga de generar movimiento al brazo y éste a una especie de “peine” que origina pequeñas sacudidas o “palmeteos” en la zona del fruto. Los peines llevan unas varillas de material plástico o fibra de vidrio o incluso de carbono de aprox. 5 mm de diámetro y que dañan muy poco al olivo (aunque se recomienda no querer tirar siempre la “última aceituna” por el riesgo de dañar los brotes de fruto de la próxima campaña)
Una variedad al peine es el denominado palmeador o vareadores palmeta. En vez de un peine se disponen 2 peines y el motor origina “palmeteos” entre los 2 peines.
Otra variedad consiste en el “cepilladora” que es una especie de cilindro “jaula de ardilla” que gira sobre su eje. Este modelo no lo he probado pero los vecinos que lo tienen me hablan bien de él.
Vibrador de gancho

ELÉCTRICO O A EXPLOSIÓN
Aunque la técnica de recolección es la misma la fuente de energía puede ser o bien mediante un motor eléctrico a batería o bien mediante un pequeño motor de explosión o también neumáticos que reciben la presión del aire desde calderines externos.
Son equipos bastante ligeros con un peso que en la variedad más pesada, con motor de explosión, no sobrepasa los 10 kg (6,5 kg ver) y que en la versión de batería externa o tipo neumáticos rondan el kilogramo
Motor de explosión:
El mecanismo de recolección recibe la energía desde un motor de dos tiempos. Mediante un embrague centrífugo y un reductor de velocidad se da movimiento a un mecanismo biela-manivela para los vibradores de gancho y de engranajes a los vibradores de peine. A través de la vara se transmite la vibración o el movimiento a la rama. El motor está comprendido entre los 20 y los 50 cm3 (los de menos cilindrada son para los sistemas de “peine” y los mayores para los vibradores de gancho) La refrigeración es vía aire.
Los precios son muy variables puesto que también lo son las calidades ofrecidas en el mercado. Se pueden encontrar equipos desde 800 € (motor de 20 cm3) a 1800 cm3 (50 cm3 y con potencias en torno a los 3 CV)
Vibrador eléctrico:
Cada vez son más frecuentes los motores alimentados con corriente continua desde una batería. En realidad ha sido el espectacular avance en las baterías lo que ha hecho competitivas a estas máquinas. Se recomienda recurrir a las baterías de ión litio con autonomías que permiten aguantar toda la jornada. Los primeros equipos iban con batería de Niquel Cadmio (NiCd) posteriormente se pasó a hidruro metálico pero ahora los mejores equipos las llevan de ión litio con una estupenda relación peso/potencia y peso/autonomía.
Ventajas e inconvenientes: Una de las primeras cuestiones a la hora de la compra es ¿eléctrico o a gasolina? La ventaja del eléctrico frente al de explosión está en el peso. Un eléctrico es mucho menos pesado. También gana el eléctrico en el nivel sonoro. Si los de motor de explosión andan sobre los 100 dBA los eléctricos están en 70-75 dBA También el nivel de mantenimiento es menor en el eléctrico.
Donde gana por goleada el de explosión está en la autonomía pues aunque se ha ganado mucho en la tecnología de baterías aún se está lejos de permitir largas jornadas de trabajo con una batería manejable por lo que hay que recurrir a al menos 2 baterías y tener la posibilidad de recarga en la parcela.
Si te decides por el eléctrico es interesante que lo hagas por aquellos fabricantes que permiten la intercambiabilidad de baterías. No es de recibo que pequeños agricultores como yo que tienen un poco de viñedo y un poco de olivar tenga una batería para la tijera de podar, otra para la atadora, otra para el vareador… En este punto tengo que destacar la opción de Stihll que con la misma batería cubre a toda su gama, incluso motosierras, soplador, tijera de poda, podadora en altura, vareador, desbrozadora, cortasetos. Son acumuladores de 36 V y aunque tiene diferentes modelos en función de la capacidad (Ah) la compatibilidad es total incluso vaya el acumulador montado en el propio equipo o bien en mochila.

MI EXPERIENCIA CONCRETA DE RECOLECCIÓN CON EQUIPOS PERSONALES
Coste de la recolección con equipos manuales:
Los números barajados para recolección con vibradores personales y vareado de apoyo con caída del fruto sobre mantones y posterior carga en remolque es de unos 0,25-0,30 €/kg, es decir 688 a 825 €/ha para un total de costes comprendido entre 1217 a 1532 €/ha. Es decir que la recolección supone entre el 45 y el 65 % de los costes totales de explotación.
En mi caso particular he recogido 260 olivos (140 olivos de 5 años de 1 pie y 120 olivos adultos de 3 o 4 pies) con una producción media de 13,5 kg con el uso de 1 vareador de peine con motor de explosión de Sthil y apoyo de vareo tradicional. 
Como debe ser: siempre con los precios
La recolección se ha hecho entre 2 personas con una media diaria de 715 kg/día Durante todo el periodo de recolección el vibrador siempre lo ha manejado la misma persona pues en realidad el peso es muy liviano (5,5 kg) y se puede manejar sin problemas durante toda la jornada puesto que al haber solo 2 personas es necesario ir complementando los trabajos: movimiento de mantos, vaciado, acarreo de aceituna recogida… y eso es lo recomendable para que el cuerpo no esté soportando durante toda la jornada los inconvenientes de la máquina.
He intercambiado experiencias con otro vecino que usa dos máquinas, un vibrador de rama con motor de explosión y un peine eléctrico (batería incorporada) Ellos, 2 personas, han recogido una media de 800 kg/día de picual y cornicabra.
El balance precio-prestaciones de este tipo de máquinas es muy positivo y lo aconsejo como método ideal de recolección.
¿Inconvenientes has dicho?: Si, los dos grandes inconvenientes de la máquina son los derivados del peso y las vibraciones.
En cuanto al peso se ha avanzado mucho, ahora son máquinas mucho más ligeras, y por ejemplo el vareador que he uso (SP 92C-E) no pasa de 6 kg La reducción tan espectacular de peso se debe a que se han diseñando con materiales como los termoplásticos de ingeniería, también el titanio o aleaciones de aluminio sumamente resistentes y livianas. Y en referencia a las vibraciones son leves y gracias al arnés de seguridad apenas se transmiten al cuerpo pero si que tanto las manos como los brazos si se prolongase el manejo durante toda la jornada llega a causar cansancio en estas extremidades.
Daños en la oliva: Mucho menores que los producidos con el vareo tradicional. Es cierto que algún daño se hace pero apenas se rompen ramas y solo algunos roces en la corteza.

EL MEJOR EQUIPO A COMPRAR
Algunos daños en la corteza exterior de las ramas
El vareador personal está indicado para aquellos cultivadores que no superan los 1000 olivos. La elección de vibrador a motor o eléctrico, cubicaje o potencia, vareador de gancho o palmeta… no es fácil para un nuevo comprador. Mi recomendación es que procure acercarse a un servicio de venta profesional y que allí con el asesoramiento de expertos se informe, intente probar todos los modelos y lo medite bien. Conceptos que debe tener en cuenta para elegir un buen producto:
  • Elegir una primera marca con un buen servicio postventa
  • Peso: lo ideal es reducirlo al máximo pero sin perder resistencia y fiabilidad
  • Sistema de “cuelgue”: comprobar sistema de arnés, sujeciones, adaptación al cuerpo
  • Dispositivo antivibración: los buenos vibradores llevan mangos que reducen al mínimo las vibraciones que llegan al operario. Normalmente las asas se aíslan de la vara y del motor
  • Vara: lo normal son longitudes entre 1,70 a 2,50 m aunque también las hay extensible y con tubo divisible para un mejor transporte
  • Empuñadora multifuncional: en la empuñadura se debe tener el control del acelerador y apagado
Precios: Hasta comprar mi equipo barajé varias alternativas. Al final me decidí por un buen equipo y con un buen servicio técnico local. Esas fueron las principales razones para decidirme por Stihl fabricante de prestigio mundial y su servicio técnico en mi localidad (José V. Moyano de El Provencio)
Mi principal duda fue si elegir vareador de peine o de gancho. Al final probé ambos y el peso me hizo decantarme por el de peine.
La otra gran duda era si eléctrico o explosión. El eléctrico me atrae mucho sobre todo por la posibilidad de disponer de otras pequeñas herramientas de uso cotidiano como las tijeras de poda con la misma batería.
En cuanto a la oferta y precios de Stihl son estos (los precios figuran con la oferta especial de campaña):
  • Un vareador eléctrico de peine de Stihl está en los 850 € aunque a esto hay que sumarle el acumulador y el cargador (aunque insisto en que sirve para otras máquinas como la tijera de poda, la motosierra, la podadora en altura…) en total el equipo con 1 acumulador y 1 cargador se va a 980 €, y si se opta por el acumulador de mochila de hasta 25 Ah de capacidad entonces el precio es de 1690 € aunque el cliente debe recordar la intercambiabilidad del acumulador y cargador para la correcta amortización de equipos
  • El vareador a explosión, motor de 1 CV tiene un precio de venta de 949 €. Stihl también ofrece en este caso la posibilidad de elegir el sistema combinado: motor + vareador
  • En cuanto al vareador de gancho con motor de explosión (2,9 CV) el precio es de 1449 €


2 comentarios:

  1. Un post de 10. En mis campos mis trabajadores han usado toda su vida los vareadores tradicionales. El problema de hacerlo así es que nos tocaba cambiar de varillas cada 2-3 meses (menos mal que no son caros los recambios que usábamos ya que nosotros compramos las varillas reforzadas que no llegan 6 euros) y cuando llevas ya varios años te das cuenta de que mejor tener une eléctrica. Lo que siempre me echaba hacia atrás era el hecho de no saber muy bien como funcionaban si eran mejores si valian la pena y todo eso que despues de leer este articulo ya me ha quedado totalmente claro. Muchas gracias jefe!!!

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    1. ¡Esto te sube la moral para un año al menos! Gracias Martín, si alguna vez nos encontramos ya sabes que te debo un vino con unas aceitunas de tapa.

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