viernes, 8 de junio de 2012

NEUMÁTICOS 2. EL CURIOSITY, LA ENVIDÍA DE LOS “TODOCAMINOS” TERRÍCOLAS


Curiosity en laboratorio NASA
¿QUÉ ES EL CURIOSITY?
Las ruedas del Curiosity, el robot que ya ha sido enviado por la NASA a Marte, serían la envidia de cualquier automóvil en la Tierra. La gran novedad, a nivel locomotor, consiste en el diseño de unas nuevas y modernas llantas que tienen como fin evitar los problemas que tuvieron los vehículos antecesores: los lunares rover (Lunar Roving Vehicle) y los marcianos Spirit, Opportunity y Sojourner.

Curiosity probándose en tierra
El Curiosity es un vehículo explorador todo terreno, que cuenta con poderosos instrumentos e impulsado por una batería nuclear. El Curiosity dispone de seis ruedas y amén del ya mencionado sistema de llantas, también utiliza un sistema de suspensión 'rocker-bogie' similar al de los predecesores pero mejorado (su curiosa suspensión hace que todas las ruedas permanezcan en contacto con el suelo hasta en los terrenos más abruptos) y sobre todo mayorado (el Curiosity es bastante más grande que los anteriores) Cada rueda tiene su propio motor de accionamiento y las ruedas de los laterales tienen además motores independientes para manejar la dirección. Uno de los problemas principales de los anteriores vehículos era que se podían hundir o no eran capaces de superar grandes obstáculos. El Spirit hundió sus pequeñas ruedas en la tierra marciana en abril de 2009. Aún hoy puede mover sus ruedas pero no son capaces de salir de la fina capa de arena que las retine. A pesar del inconveniente de la movilidad, tanto el Spirit como el Opportunity han batido todos los récords imaginados। Se les dio, y diseñó, para tres meses de vida y todavía hoy transmiten fotografías e información (en total han recorrido más de 20 km de la superficie de Marte).
Comparativa ruedas vehículos marcianos

Robot Curiosity. Esquema de E. Rodríguez
EN MARTE
el Curiosity: El rover marciano conocido también como MSL (Mars Science Laboratory) lleva 6 ruedas, cada una con su propio motor eléctrico. Las cuatro ruedas de las esquinas tienen un sistema de giro independiente, lo que permite al vehiculo girar sobre si mismo, sin necesidad de desplazarse. En total hay 10 motores eléctricos, seis para desplazarse y cuatro direccionales. Los motores se alimentan por energía eléctrica procedente de un par de baterías ión-lítio de 41 Ah cada una. Estas, a su vez, se recargan de un generador termoeléctrico de radioisótopos. Es decir el “motor” principal es nuclear con 5 kg de material radiactivo consistente en dióxido de plutonio. La batería nuclear pesa 45 kg En total el módulo nuclear es capaz de generar 2700 Wh de calor al día y con una potencia de 123 W y una tensión de 28 V de CC. La vida útil de las baterías, nuclear e Ion-Litio es de unos 14 años, así que si no fallan otros sistemas se espera que haya laboratorio para rato. La suspensión le permitirá inclinarse hasta 45 º en cualquier dirección sin llegar a caerse, aunque el software está diseñado para evitar inclinaciones de más de 30º. El rover podrá superar obstáculos con una altura similar a la de cada rueda -50 cm- y tendrá una velocidad máxima de 4 cm/s (0,144 km/h) El MSL Curiosity tiene un peso de 900 kg terrestres (la gravedad marciana es un 38 % de la terrícola) y unas dimensiones 3*2,8*2,2 m (largo, ancho, alto), es decir una especie de Seat Marbella. Me parece interesante y sobre todo un acontecimiento histórico poder ver en el siguiente vídeo (pinchar) como los ingenieros de la NASA proceder a poner las ruedas a girar por primera vez।


Rover Apollo 15

Detalle chevron. Foto propia




UN AUTÉNTICO TODOTERRENO
Se trata de un vehículo auténticamente todoterreno y por el tamaño se parece más a los antiguos Lunar Roving Vehicle que a los anteriores “juguetes” de Marte. La diferencia con los rover lunares es que aquellos llevaban hasta 2 astronautas (aunque siempre lo condujo uno solo), y el Curiosity, en cambio, sustituye al astronauta por un laboratorio. Otra diferencia es el peso, los rover lunares pesaban, en vacío 210 kg terrestres (solo 35 kg lunares), mientras que el rover marciano pesa 900 kg. Las dimensiones de ambos son casi idénticas aunque otra diferencia es la velocidad: los lunares (hubo hasta 3 unidades) llegaba hasta los 20 km/h (el record lo ostenta el astronauta Eugene Cernan, Apollo 17, que llegó a circular a 18,9 km/h) y el Curiosity se tomará sus “paseos” de forma mucho más tranquila. Los rover llevaban 4 ruedas, también alimentadas por motores eléctricos, de 0,25 CV a 10.000 rpm y una relación de transmisión 80:1. Disponían de una autonomía de 90 km proporcionada por unas baterías de plata y zinc en disolución de hidróxido de potasio de 36 V y 121 Ah
Los neumáticos de los rover lunares fueron construidos por General Motors y constaban de una llanta de aluminio y una malla de zinc de 81 cm de diámetro y 23 centímetro de ancho. La malla se tachonaba de chevrones de titanio para mejorar la tracción. Los neumáticos tradicionales de caucho rellenos de aire a presión no son útiles en otros planetas: el caucho tiene propiedades muy variables según la temperatura, además se degrada mucho con la acción de la radiación solar directa. Aquellos vehículos resultaron un éxito sin precedente (todavía pueden verse, con potentes telescopios, aparcados en la superficie lunar), por eso ahora se ha partido de aquel diseño. Los inicios de los nuevos neumáticos se concretaron en 2009, el encargo de la NASA se hizo a Goodyear. En este caso, la malla está formada por más de 800 muelles que le permitan adaptarse a las características de la superficie y recuperar rápidamente las proporciones originales. Las ruedas, con sus llantas de aluminio tienen un tamaño de 20 pulgadas (unos 50 cm) Las excelencias de sus ruedas, su suspensión, transmisión y su sistema de movilidad se demostrarán en agosto de este año (2012), entonces el viaje al planeta rojo finalizará y si todo sale como se espera podremos ver un autentico todoterreno en la superficie marciana



2 comentarios:

  1. Pues leo esta noticia,al hacer una busqueda en google, sobre las causas que han llevado a la degradación de las ruedas con tan sólo 15 km. de uso !!!!! Son por lo visto unas ruedas muy malas, y m´s si consideramos que cada rueda soportará un 37% de su peso en la tierra dada la menor gravedad de marte. En fin veremos si puede acabar la misión o se quedará por el camino.

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    1. Pues Pako llevas toda la razón, me quedé "planchado" cuando leí hace unas semanas la noticia y sobre todo vi fotos que "daban miedo". Parece que los técnicos de NASA le quitan importancia e incluso llegan a afirmar que el Curiosity podría rodar sobre los propios radios... pero luego se han callado. No entiendo cual es el problema: atmósfera, terreno, cambios brutales de temperatura.... pero todo esto ya se sabía. En fin esperemos que pueda continuar. Si te gustan estos temas yo sigo el blog Eureka que es fantástico.
      Un saludo

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